Sartor y el Laberinto de la Confianza: Crónica de un Escándalo entre la Bolsa, el Poder y la Pasión Azul

Sartor y el Laberinto de la Confianza: Crónica de un Escándalo entre la Bolsa, el Poder y la Pasión Azul
2025-07-08

- La intervención de Sartor AGF por la CMF ha destapado una compleja red de préstamos a relacionados, conflictos de interés y un modelo de negocio que hoy está bajo escrutinio judicial y regulatorio.

- El caso trasciende lo financiero, impactando directamente la propiedad y gobernanza de Azul Azul, concesionaria del club Universidad de Chile, y salpicando a otras figuras influyentes del fútbol chileno.

- A meses del inicio, la trama enfrenta a reguladores, ejecutivos e inversionistas en una batalla legal que pone a prueba la confianza en el mercado de capitales y la transparencia de sus actores.

Inicio Contextualizado: La Batalla por el Relato

Lo que comenzó hace meses como una fiscalización de rutina por parte de la Comisión para el Mercado Financiero (CMF), ha escalado hasta convertirse en una de las tramas más complejas y multifacéticas del ecosistema financiero y deportivo chileno reciente. Hoy, el Caso Sartor no es solo la historia de una administradora de fondos en liquidación; es un campo de batalla legal y narrativo donde se disputan millones de dólares, la reputación de altos ejecutivos y el control de uno de los clubes de fútbol más importantes del país, la Universidad de Chile. Con cargos formulados por el regulador, querellas cruzadas y activos embargados, la pregunta ya no es si hubo irregularidades, sino quién es el responsable final del perjuicio a los inversionistas y hasta dónde se extienden las redes de influencia.

Desarrollo Analítico: De la Supervisión al Colapso

La crisis se desató cuando la CMF detectó "deficiencias relevantes" en la gestión de Sartor Administradora General de Fondos (AGF), culminando en la revocación de su licencia y el inicio de un proceso de liquidación. El núcleo del problema, según el regulador, era un modelo de negocios que no cautelaba debidamente los intereses de sus aportantes. La investigación reveló una intrincada red de operaciones con partes relacionadas, donde los fondos de inversionistas se utilizaban para financiar a empresas y personas vinculadas al propio grupo Sartor y sus ejecutivos.

La arista más mediática involucra a Michael Clark, actual presidente de Azul Azul y exdirectivo de Sartor, quien se cuenta entre los ocho ejecutivos acusados por la CMF de proporcionar información falsa al mercado y faltar a la diligencia debida. Esta conexión se materializó con el embargo de más de 23 millones de acciones de Azul Azul, controladas por el fondo FIP Tactical Sport —ligado a Sartor—, como garantía por una deuda impaga de más de $7 mil millones reclamada por el liquidador de la AGF, Ricardo Budinich.

La trama se expandió aún más cuando Budinich reveló la existencia de préstamos por más de 5 millones de dólares a sociedades de Marcelo Pesce, exsocio del club Huachipato, donde su histórico socio, Victoriano Cerda, habría actuado como aval y codeudor solidario. Aunque la defensa de Cerda niega su participación, la revelación expuso la delgada línea que separa los negocios financieros de las esferas de poder en el fútbol chileno.

Perspectivas Contrastadas: ¿Protección o Perjuicio?

El caso ha generado una profunda disonancia entre los actores, cada uno con una interpretación de los hechos que desafía a las demás.

  • La Visión del Regulador (CMF): Para la CMF, su actuar ha sido un ejercicio de responsabilidad ineludible. Su vicepresidente, Augusto Iglesias, ha sido enfático: el problema no eran las operaciones con relacionados per se —figura permitida por ley—, sino un "modelo de negocios" completo que no respondía "exclusivamente al mejor interés de los aportantes". La decisión de liquidar ciertos fondos, en vez de traspasarlos, se fundamenta en un mandato legal que busca proteger al universo total de inversionistas, aunque esta medida sea criticada por algunos afectados.
  • La Defensa de Sartor: Desde la vereda de los acusados, la narrativa es otra. Sostienen que sus operaciones eran legales y que la CMF, con sus decisiones, ha perjudicado a los mismos inversionistas que pretende proteger. En tribunales, han desplegado una defensa aguerrida, llegando a calificar los pagarés que sustentan el embargo de las acciones de Azul Azul como "ideológicamente falsos", argumentando que fueron suscritos por personas sin poder para representar al fondo deudor. A su vez, han acusado a uno de sus principales aportantes, Credicorp Capital, de intentar una "toma de control hostil", una afirmación que Credicorp ha desmentido tajantemente, posicionándose como una de las principales víctimas.
  • El Dilema de los Inversionistas: Los aportantes, lejos de ser un bloque monolítico, reflejan la confusión del caso. Mientras grandes actores como Credicorp han iniciado acciones penales y civiles contra Sartor, un grupo de inversionistas minoritarios —incluyendo al execonomista jefe de la propia AGF— recurrió a la Corte de Apelaciones para frenar la liquidación de uno de los fondos, argumentando que la medida era "gravosa y lesiva". El revés judicial que sufrieron demuestra la complejidad de encontrar una solución que satisfaga a todos.

Contexto Estructural: Fondos Privados y la Fiebre del Fútbol

El Caso Sartor no es un hecho aislado. Emerge en un contexto donde los Fondos de Inversión Privados (FIP) han ganado popularidad como vehículos de inversión flexibles, pero cuya menor regulación puede dar pie a estructuras opacas y potenciales conflictos de interés. Este escándalo obliga a cuestionar si la normativa actual es suficiente para proteger a los inversionistas en un mercado cada vez más sofisticado.

Asimismo, revive el eterno debate sobre la relación entre el dinero y el fútbol. La transformación de los clubes en sociedades anónimas deportivas abrió la puerta a modelos de negocio donde la pasión de los hinchas convive con las frías lógicas del mercado de capitales, generando tensiones y sospechas que este caso no ha hecho más que exacerbar.

Estado Actual: Un Laberinto sin Salida Aparente

A varios meses de su inicio, la historia está lejos de concluir. El proceso sancionatorio de la CMF sigue su curso, mientras las batallas legales se libran en múltiples frentes. La confianza, pilar fundamental del mercado financiero, se ha visto erosionada. El futuro de los activos de Sartor, la responsabilidad final de sus ejecutivos y la estabilidad en la propiedad de Universidad de Chile penden de decisiones judiciales y regulatorias que tardarán en llegar. El caso Sartor se ha consolidado como un complejo laberinto que pone a prueba la resiliencia de las instituciones, la ética de los negocios y la transparencia de dos mundos que, en Chile, parecen estar indisolublemente ligados: las finanzas y el fútbol.

La historia presenta una confluencia única de poder financiero, regulación de mercados, gobernanza corporativa y la pasión del deporte masivo. Su evolución, desde las acusaciones iniciales hasta las batallas legales y su impacto en la propiedad de un club de fútbol, permite un análisis profundo sobre la ética en los negocios, la efectividad de la supervisión fiscal y las frágiles fronteras entre el capital y la identidad social.