Hace poco más de dos meses, la mañana del 2 de mayo, la tierra se fracturó con violencia en uno de los rincones más despoblados y silenciosos del planeta: el Mar de Drake, al sur de Puerto Williams. Un sismo de magnitud 7.5, seguido de más de una docena de réplicas, activó las alarmas en todo Chile. Sin embargo, en las ciudades más cercanas como Punta Arenas o Puerto Williams, la percepción fue leve, casi anecdótica. A pesar de ello, el país entero presenció en tiempo real un despliegue de emergencia que puso a prueba, como nunca antes, la capacidad de respuesta del Estado en su frontera más austral y aislada. Hoy, con la calma restituida, el evento se revela no como una catástrofe, sino como un invaluable simulacro a escala real que desnudó tanto las fortalezas consolidadas como las grietas latentes del sistema de prevención chileno.
A las 08:58 horas, el Centro Sismológico Nacional (CSN) confirmó el evento. En minutos, la maquinaria estatal se activó con una precisión que refleja años de lecciones aprendidas. El Servicio Hidrográfico y Oceanográfico de la Armada (SHOA) emitió una alerta de tsunami, y el Servicio Nacional de Prevención y Respuesta ante Desastres (SENAPRED) ordenó la evacuación preventiva de todo el borde costero de la Región de Magallanes y el Territorio Chileno Antártico.
La respuesta política fue unánime y transversal. El Presidente Gabriel Boric, magallánico de origen, suspendió su agenda para monitorear la emergencia desde La Moneda. "Todos los recursos del Estado están a disposición", declaró, en un tono replicado por candidatos presidenciales de todo el espectro, desde Johannes Kaiser (Partido Nacional Libertario) hasta Jeannette Jara (PC), quienes llamaron a la calma y a seguir las instrucciones oficiales. Esta unidad de discurso, al menos en la fase inicial, fue clave para evitar el pánico.
En terreno, la evacuación fue ejemplar. Según cifras de SENAPRED, cerca de 1.822 personas se movilizaron ordenadamente hacia zonas seguras en comunas costeras y bases militares. El alcalde de Puerto Williams, Patricio Fernández, destacó que, pese a no haber sentido un sismo de tal magnitud en la historia reciente de la comuna, "se ha evacuado el borde costero por completo". El sistema de Alerta de Emergencias (SAE) funcionó, y los mensajes llegaron a los celulares, cumpliendo su función de reforzar la orden de las autoridades.
Mientras la evacuación se desarrollaba, surgió un desafío propio del siglo XXI: la desinformación. Videos viralizados en redes sociales mostraban un notorio recogimiento del mar en el Estrecho de Magallanes, generando alarma. Sin embargo, la comunidad científica reaccionó con celeridad. La Red Geocientífica de Chile y el propio SHOA aclararon que el fenómeno correspondía a una marea baja normal y que la geografía accidentada de los fiordos y canales hacían "prácticamente imposible que un tsunami pueda llegar a Punta Arenas y Porvenir".
Este episodio subraya una tensión moderna: la eficacia de un sistema de alerta depende no solo de la tecnología, sino también de la capacidad de comunicar la ciencia de forma clara para contrarrestar el pánico viral. El "tsunami", finalmente, solo se manifestó de forma "instrumental": una leve variación de 23 centímetros registrada en los sensores de la Base O"Higgins, imperceptible para el ser humano pero suficiente para validar la precaución inicial. El geólogo Felipe Aron lo calificó como un evento "muy interesante en términos científicos", una oportunidad para estudiar la tectónica de la Placa de Scotia sin lamentar víctimas.
Con la amenaza de tsunami cancelada por completo horas después, el balance final dejó más aprendizajes que daños.
Fortalezas Visibles:
Debilidades y Preguntas Abiertas:
El sismo de Magallanes no está cerrado. La emergencia inmediata concluyó, pero la fase de análisis crítico apenas comienza. Fue un recordatorio de que la soberanía no solo se ejerce con presencia, sino con la capacidad de proteger a quienes habitan las fronteras más lejanas y vulnerables del territorio. Chile superó la prueba, pero la naturaleza ya le entregó el temario para el próximo examen.
2025-05-02