Shein enfrenta a Europa: del auge imparable al cerco regulatorio y el escándalo infantil

Shein enfrenta a Europa: del auge imparable al cerco regulatorio y el escándalo infantil
Economía
Empresas y Negocios
2025-11-10
Fuentes
elpais.com es.wired.com www.df.cl elpais.com elpais.com www.latercera.com www.latercera.com es.wired.com cooperativa.cl www.bbc.com elpais.com

- Modelo de negocio basado en algoritmos y producción ultraveloz

- Choque frontal con regulaciones europeas y escándalos éticos

- Tensiones geopolíticas y desafíos para la moda rápida global

El gigante chino Shein, que en pocos años revolucionó la industria de la moda ultrarrápida, se encuentra en el centro de una tormenta que trasciende lo comercial y pone en jaque su modelo de negocio y su reputación en Europa.

Desde su fundación en 2008 en Nanjing, y con sede en Singapur desde 2022, Shein ha crecido vertiginosamente gracias a un sofisticado sistema que combina inteligencia artificial para predecir tendencias, una red flexible de proveedores y precios extremadamente bajos. En 2024, la empresa matriz Roadget Business reportó ingresos por 37.000 millones de dólares y proyecta para 2025 beneficios netos cercanos a los 2.000 millones, acercándose a gigantes como Inditex y H&M.

Sin embargo, este éxito ha desatado una reacción europea que va mucho más allá de la competencia comercial. La Unión Europea ha intensificado la vigilancia sobre Shein bajo la Ley de Servicios Digitales, investigando prácticas como descuentos falsos, venta bajo presión y falta de transparencia, que vulnerarían la legislación comunitaria. En paralelo, Francia suspendió temporalmente el acceso a la web de Shein tras un escándalo por la venta de muñecas sexuales con apariencia infantil, que desató protestas y denuncias legales, poniendo en evidencia fallas en el control de contenidos y productos en la plataforma.

Este episodio no es aislado. Italia multó a Shein con un millón de euros por greenwashing, y la empresa ha reconocido casos de trabajo infantil entre sus proveedores, aunque asegura haberlos corregido. Organizaciones internacionales han denunciado condiciones laborales precarias, jornadas excesivas y bajos salarios en los talleres que abastecen la producción ultrarrápida, especialmente en el llamado "pueblo Shein" en Guangzhou.

Desde la óptica europea, el modelo de Shein representa un desafío a las normas laborales, ambientales y de protección al consumidor. La eliminación progresiva de exenciones fiscales y arancelarias para pequeños envíos, que beneficiaban enormemente a plataformas chinas, busca nivelar el terreno de juego, aunque genera tensiones comerciales y políticas con China, cuyo gobierno mantiene una postura prudente y solicita respeto al principio de economía de mercado.

Las voces en Europa reflejan un amplio espectro de perspectivas:

- Autoridades y reguladores enfatizan la necesidad de proteger a consumidores y trabajadores, asegurando que las plataformas cumplan con la legislación y no fomenten prácticas ilegales o dañinas.

- Empresarios y distribuidores locales demandan igualdad en condiciones competitivas frente a gigantes digitales que aprovechan vacíos legales y fiscales.

- Organizaciones sociales y ambientalistas denuncian la huella ecológica y el impacto social de la moda ultrarrápida, reclamando una industria más sostenible y ética.

- Consumidores europeos, especialmente jóvenes, enfrentan un dilema entre el atractivo de precios bajos y la conciencia creciente sobre las consecuencias sociales y ambientales.

Por su parte, Shein ha anunciado medidas para reforzar controles, eliminar productos problemáticos y mejorar la transparencia, aunque la investigación europea continúa y podría derivar en sanciones significativas.

El caso Shein se inscribe en un contexto global donde la digitalización y la deslocalización industrial generan tensiones entre innovación, regulación y valores sociales. Europa intenta equilibrar el impulso tecnológico y económico con la defensa de estándares laborales, ambientales y éticos, en un escenario geopolítico marcado por rivalidades comerciales y disputas por la soberanía digital.

En definitiva, la historia de Shein en Europa pone en evidencia que el éxito rápido y disruptivo no está exento de costos y resistencias. El gigante chino enfrenta un coliseo donde se juegan no solo mercados, sino también principios y modelos de desarrollo. Las consecuencias de este enfrentamiento serán clave para definir el futuro de la moda, el comercio digital y la relación entre China y Europa, con impactos que trascienden fronteras y sectores.

Fuentes consultadas incluyen reportajes de EL PAÍS, BBC News Mundo, Reuters y Bloomberg, además de informes de la Comisión Europea y organizaciones internacionales de derechos laborales y ambientales.