Israel retoma ataques en Gaza: ¿ruptura del alto al fuego o ajuste táctico? : La compleja danza de la violencia y la diplomacia en Medio Oriente

Israel retoma ataques en Gaza: ¿ruptura del alto al fuego o ajuste táctico? : La compleja danza de la violencia y la diplomacia en Medio Oriente
Actualidad
Internacional
2025-11-12
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- Israel realiza ataques selectivos en Gaza tras un breve cese al fuego.

- Estados Unidos respalda la respuesta israelí, mientras crecen las críticas internacionales.

- La población civil sigue pagando un alto costo, con decenas de muertos y heridos en medio del conflicto.

El alto al fuego en Gaza, que entró en vigor el 27 de septiembre de 2025, parecía ofrecer un respiro a un conflicto que ha marcado la región durante décadas. Sin embargo, a poco más de dos semanas, Israel lanzó una serie de ataques selectivos contra milicianos de la Yihad Islámica en la Franja, reavivando las tensiones y poniendo en jaque la estabilidad del acuerdo.

Este ciclo de violencia no solo ha sido un choque de armas, sino también de narrativas y legitimidades. Desde Washington, el expresidente Donald Trump asumió una postura clara y contundente, "Israel tiene derecho a responder a ataques y proteger a sus soldados", en referencia a la muerte del sargento Yona Efraim Feldbaum, ocurrido en Rafah. Esta declaración, recogida por medios como La Tercera y Cooperativa, reafirmó el respaldo estadounidense a la acción militar israelí, aunque con la promesa de mantener el alto al fuego.

En contraste, voces palestinas y organizaciones internacionales han denunciado la muerte de más de 90 personas y cientos de heridos en Gaza en estas últimas semanas, muchas de ellas civiles atrapadas en zonas urbanas densamente pobladas. Según el Ministerio de Sanidad de Gaza y reportes de medios locales, la ofensiva en áreas como Nuseirat y Jan Yunis ha dejado una estela de destrucción y sufrimiento.

El Ejército israelí justifica sus ataques como medidas preventivas contra amenazas terroristas inminentes, asegurando haber realizado "operaciones precisas" para neutralizar milicianos que planeaban atentados. Sin embargo, la falta de pruebas públicas y la persistencia de víctimas civiles generan cuestionamientos sobre la proporcionalidad y efectividad de estas acciones.

En el tablero político, la situación ha polarizado opiniones. Mientras sectores conservadores y pro-Israel en Estados Unidos y algunos países occidentales respaldan la firmeza israelí, grupos de izquierda y organizaciones de derechos humanos llaman a una revisión urgente del enfoque, advirtiendo que la violencia solo perpetúa el ciclo de odio y sufrimiento.

Regionalmente, países árabes muestran una mezcla de condenas formales y llamados a la calma, conscientes de que una escalada podría desestabilizar aún más Medio Oriente. La comunidad internacional, a través de Naciones Unidas y la Unión Europea, ha instado a ambas partes a respetar el alto al fuego y a retomar negociaciones con mediación neutral.

“El desafío es cómo mantener la seguridad sin sacrificar la vida de inocentes”, señala un analista en seguridad regional, reflejando el dilema que enfrentan los gobiernos involucrados.

En definitiva, lo ocurrido en Gaza en estas semanas no es solo un episodio más de violencia, sino un reflejo de las complejas contradicciones que atraviesan el conflicto israelí-palestino:

- La tensión entre seguridad y derechos humanos.

- La influencia de potencias externas con agendas propias.

- La fragilidad de los acuerdos en contextos de desconfianza histórica.

La muerte del soldado israelí y los ataques selectivos no solo reavivaron el fuego en Gaza, sino que evidenciaron la dificultad de sostener un alto al fuego en un escenario donde la violencia y la diplomacia coexisten en un equilibrio precario.

Para quienes observan desde la distancia, queda claro que el camino hacia una paz duradera sigue siendo esquivo, y que cada acción, por pequeña que parezca, tiene consecuencias profundas para las comunidades atrapadas en este conflicto milenario.