
Un escenario electoral que se calienta a pocos días de la primera vuelta presidencial del domingo 16 de noviembre ha puesto a Jeannette Jara en el centro de un intenso coliseo político.
El 11 de noviembre, Jara cerró su campaña en la Plaza de Maipú ante unas 20.000 personas, reafirmando un discurso de esperanza y unidad bajo la consigna: "Chile no se cae a pedazos; es un gran país". La candidata del bloque de izquierda, primera comunista en llegar con opciones reales a La Moneda desde 1990, se apoya en un bloque amplio de ocho partidos y en el respaldo de figuras locales como el alcalde Tomás Vodanovic.
Pero la campaña no solo ha sido un desfile de adhesiones y ovaciones.
El 30 de octubre, Jara se reunió con la directiva del Sindicato de Futbolistas Profesionales (Sifup), abordando temas como las condiciones laborales, la implementación de la jornada laboral de 40 horas y la salud mental en el deporte. Este acercamiento a un sector emblemático refleja la intención de la candidata de conectar con demandas sociales concretas y diversificar su base de apoyo más allá del mundo político tradicional.
La migración se ha convertido en un terreno de confrontación directa. El 28 de octubre, Jara criticó duramente la propuesta de José Antonio Kast de expulsar a migrantes ilegales y hacer que ellos mismos paguen su pasaje de retorno. En palabras de Jara, se trataba de una "propuesta imaginaria de un resultado imaginario con destinos imaginarios".
"Realmente lo encuentro insólito y espero que la gente escuche lo que están diciendo los candidatos, porque lo que ha dicho el candidato Kast es extremadamente grave", afirmó, cuestionando la viabilidad y la ética de la propuesta, además de la falta de recepción por parte de países como Venezuela, principal origen de migrantes irregulares.
Este episodio no solo expone diferencias programáticas, sino también narrativas que apelan a distintos sectores sociales y a la percepción ciudadana sobre seguridad y derechos humanos.
En medio de la campaña emergió una polémica que pone en tensión la imagen de Jara como líder política.
El 25 de octubre, Andrés Jouannet, diputado y presidente del partido Amarillos por Chile, desmintió que Jara haya liderado la histórica reforma previsional aprobada durante su paso por el Ministerio del Trabajo. Jouannet atribuyó el liderazgo político a Mario Marcel, exministro de Hacienda, y calificó como un mito la idea de que Jara fue la artífice principal de la iniciativa.
Este cuestionamiento, que Jara y su comando han debido enfrentar, refleja las luchas internas y las disputas por el reconocimiento en el oficialismo, que pueden influir en la percepción de los votantes sobre la capacidad de gestión y liderazgo de la candidata.
El escenario electoral es un verdadero coliseo donde convergen distintas voces:
- Desde la izquierda, Jara representa un proyecto que apuesta a la continuidad de reformas sociales, con énfasis en derechos laborales, justicia social y una narrativa de unidad nacional.
- Desde la derecha radical, Kast encarna un discurso de orden y control, con propuestas polémicas en migración y seguridad que buscan movilizar a un electorado preocupado por la estabilidad.
- Sectores independientes y críticos observan con distancia las disputas, destacando la importancia de verificar las propuestas y la transparencia en las campañas.
A pocos días de la elección, algunos hechos son innegables:
- Jara ha logrado consolidar un bloque amplio y movilizar a un electorado diverso, pero enfrenta desafíos para convencer más allá de su base tradicional.
- Las tensiones con Kast evidencian una polarización fuerte, que puede profundizar la fragmentación social y política si no se aborda con responsabilidad.
- La disputa por la autoría de reformas clave como la previsional pone en evidencia la importancia de la claridad y la transparencia en la comunicación política.
Este cuadro invita a la ciudadanía a mirar más allá de la inmediatez y a evaluar con rigor las propuestas y las trayectorias de quienes aspiran a gobernar el país. La campaña de Jeannette Jara, con sus luces y sombras, es un reflejo del Chile actual: complejo, plural y en busca de un rumbo claro.
Fuentes: El País Chile, Cooperativa.cl, Cambio21.cl