Presupuesto 2026 en la encrucijada: La fractura interna del oficialismo y el desafío de la responsabilidad fiscal

Presupuesto 2026 en la encrucijada: La fractura interna del oficialismo y el desafío de la responsabilidad fiscal
Actualidad
Política
2025-11-13
Fuentes
cambio21.cl elpais.com www.biobiochile.cl www.latercera.com www.latercera.com cambio21.cl cambio21.cl www.latercera.com cooperativa.cl www.latercera.com elpais.com elpais.com www.latercera.com cambio21.cl

Distancia creciente entre Jeannette Jara y el Gobierno; dilema fiscal en la Ley de Presupuesto; presión social y política para aumentar gasto social.

En los días posteriores a la presentación del Presupuesto 2026, la escena política chilena exhibe una tensión inédita dentro del oficialismo, que se ha traducido en un debate público con ecos que van más allá de la simple discusión económica. El 11 de noviembre, el Gobierno defendió su propuesta ante los cuestionamientos de Jeannette Jara, candidata presidencial del pacto Unidad por Chile, quien ha marcado distancia con el Ejecutivo en materia presupuestaria y política.

La fractura se profundiza cuando Jara denuncia una demora inadecuada en la gestión de casos críticos dentro del Gobierno, ejemplificando con la polémica del subsecretario Manuel Monsalve, y llama a corregir el rumbo del Presupuesto para aumentar el gasto social, especialmente en subsidios habitacionales y programas para adultos mayores. “Existen recursos clave para la calidad de vida de las personas, y que hoy han sido excluidos de la propuesta que se ha llevado al parlamento”, enfatizó la candidata en sus declaraciones públicas.

Frente a este escenario, el ministro del Interior, Álvaro Elizalde, y la subsecretaria de Hacienda, Heidi Berner, sostienen que la propuesta del Ejecutivo busca un equilibrio delicado entre responsabilidad fiscal y énfasis social. El presupuesto contempla aumentos significativos en áreas como Vivienda (37%) y Salud (30%), con énfasis en planes como el de Emergencia Habitacional y la recuperación de empleo postpandemia. Sin embargo, también se insiste en mantener un déficit estructural cercano a cero, objetivo que limita la flexibilidad para expansiones fiscales.

La ministra vocera, Camila Vallejo, ha pedido que las críticas se acompañen de propuestas concretas, subrayando que el proceso legislativo es un espacio de diálogo donde convergen diversas visiones, tanto del oficialismo como de la oposición. “Lo que a nosotros nos importa, sobre todas las cosas, es que las críticas vengan acompañadas de propuestas, porque si no, no podemos avanzar”, afirmó.

Este choque de perspectivas refleja una tensión más profunda: la dificultad de conciliar las demandas sociales urgentes con las restricciones macroeconómicas que impone la actual coyuntura internacional y las metas fiscales comprometidas. Por un lado, voces como la de Jara representan a sectores que reclaman mayor inversión pública para hacer frente a las desigualdades y mejorar la calidad de vida de las familias. Por otro, el Ejecutivo y parte del oficialismo advierten sobre los riesgos de un gasto descontrolado que podría desestabilizar la economía y comprometer la confianza de los mercados.

Desde una óptica política, esta disputa exhibe la complejidad de un oficialismo fragmentado, donde la candidatura de Jara no solo desafía la línea del Gobierno, sino que también pone en evidencia las tensiones internas del Partido Comunista y la alianza en general. La distancia entre el Ejecutivo y la candidata se ha ido haciendo visible en el último año, con episodios que han tensionado la cohesión política y la narrativa oficial.

En el plano legislativo, la discusión presupuestaria se ha convertido en un escenario clave para medir la capacidad del oficialismo para construir acuerdos amplios y evitar una parálisis que afecte la gobernabilidad. La negociación incluye no solo a parlamentarios oficialistas y opositores, sino también a actores sociales que presionan por mayores recursos en áreas sensibles.

En definitiva, la discusión del Presupuesto 2026 trasciende el mero ajuste numérico y se instala como un desafío político y social que pone en juego la viabilidad del proyecto oficialista y la percepción ciudadana sobre la capacidad de respuesta del Estado. La tensión entre responsabilidad fiscal y demandas sociales, así como la fractura interna del oficialismo, configuran un escenario donde las decisiones que se tomen en las próximas semanas tendrán consecuencias directas en la estabilidad política y social del país.

Conclusiones

- La defensa gubernamental del Presupuesto 2026 se enfrenta a una crítica interna que no solo cuestiona cifras, sino tiempos y prioridades políticas.

- La fractura visible entre Jeannette Jara y el Gobierno refleja tensiones ideológicas y estratégicas dentro del oficialismo que podrían afectar la cohesión de la coalición.

- La búsqueda de un equilibrio entre responsabilidad fiscal y gasto social es el núcleo del debate, con consecuencias directas en la calidad de vida y la percepción ciudadana.

- La negociación legislativa será un termómetro clave para medir la capacidad de diálogo y la gobernabilidad en un contexto de creciente polarización.

Este episodio invita a mirar más allá del titular inmediato y comprender que la disputa presupuestaria es un espejo de las complejidades políticas y sociales que enfrenta Chile en su tránsito hacia una nueva etapa electoral y de gobierno.