Inversión en Chile: La burocracia y la inseguridad como freno persistente en un escenario de oportunidades

Inversión en Chile: La burocracia y la inseguridad como freno persistente en un escenario de oportunidades
Economía
Empresas y Negocios
2025-11-14
Fuentes
elpais.com elpais.com cooperativa.cl elpais.com www.latercera.com www.latercera.com elpais.com cooperativa.cl www.df.cl www.latercera.com www.latercera.com elpais.com www.latercera.com

- Burocracia e inseguridad como obstáculos reconocidos por actores clave.

- Confianza mantenida pese a un deterioro macroeconómico notable.

- Disonancia política sobre el modelo y liderazgo para fomentar la inversión.

En un Chile que exhibe un crecimiento económico modesto y una deuda pública que supera el 45%, la inversión extranjera mantiene una confianza básica, aunque enfrenta trabas estructurales que limitan su concreción. El 9 de octubre de 2025, Juan Carlos Ureta, director ejecutivo y principal accionista de Renta 4, afirmó en una entrevista con Diario Financiero que la burocracia y la inseguridad son los principales obstáculos que frenan la inversión en el país.

Desde una perspectiva histórica, Chile ha sido visto como un polo de estabilidad institucional en la región, lo que ha atraído capitales, especialmente en sectores emergentes como la inteligencia artificial. Sin embargo, la realidad actual muestra un cuadro macroeconómico más complejo: el crecimiento ha caído a 2,5% con suerte y la inflación se mantiene en torno al 4%, cifras que contrastan con la bonanza de la década pasada.

El choque de visiones políticas se hace evidente al analizar cómo distintos candidatos presidenciales plantean la agenda económica. Mientras algunos enfatizan la necesidad de un Estado regulador y con políticas industriales activas, otros promueven un modelo basado en la libre iniciativa privada y la competencia como motores de crecimiento. Ureta señala que los postulantes que apuestan por un ambiente más favorable a la empresa y la inversión son vistos con mejores ojos por el mercado, aunque advierte que el repunte del IPSA no puede atribuirse exclusivamente a expectativas electorales.

“Lo importante no es tanto el cuadro macro, sino la actitud del país hacia el crecimiento futuro”, sostiene el empresario, destacando que Chile debe aumentar su ambición para posicionarse en la economía global, especialmente en la era de la inteligencia artificial, donde ya operan gigantes como Google Cloud, Microsoft y Amazon.

Desde el punto de vista regional, esta oportunidad tecnológica se presenta como un punto de inflexión que podría consolidar a Chile como un hub en Latinoamérica, apoyado en infraestructura como los cables submarinos de alta capacidad y el proyecto Humboldt.

No obstante, las voces sociales y expertos en políticas públicas advierten que la persistente inseguridad y la compleja burocracia no solo afectan la llegada de capitales, sino que también erosionan la confianza ciudadana en las instituciones y generan un ambiente de incertidumbre jurídica y regulatoria. Esta tensión se refleja en la judicialización de proyectos y en la percepción de que los procesos administrativos son lentos y poco transparentes.

La narrativa empresarial y la política muestran, por tanto, una disonancia cognitiva constructiva: mientras se reconoce la necesidad de atraer inversión para generar empleo y crecimiento, persisten diferencias profundas sobre el rol del Estado y la manera de superar los obstáculos estructurales.

Conclusiones y consecuencias:

- Chile conserva un atractivo relativo para la inversión extranjera, pero debe resolver problemas estructurales que limitan su potencial.

- La burocracia y la inseguridad son frenos que afectan tanto la percepción como la concreción de proyectos.

- La agenda política está dividida entre modelos que priorizan la iniciativa privada y aquellos que buscan un rol más activo del Estado, con consecuencias directas en el clima de inversión.

- La apuesta tecnológica, especialmente en inteligencia artificial, constituye una ventana de oportunidad que requiere un liderazgo claro y una reducción de trabas regulatorias.

En definitiva, la historia de la inversión en Chile en 2025 es la de un país en tensión entre su tradición de estabilidad y los desafíos contemporáneos que exigen reformas profundas y un consenso político que aún está por alcanzarse.