Michael Burry cierra su fondo y desafía la euforia tecnológica: ¿está Wall Street en una burbuja?

Michael Burry cierra su fondo y desafía la euforia tecnológica: ¿está Wall Street en una burbuja?
Economía
Empresas y Negocios
2025-11-14
Fuentes
www.df.cl www.df.cl www.df.cl www.latercera.com www.df.cl www.latercera.com www.df.cl www.df.cl www.df.cl www.df.cl www.df.cl elpais.com www.df.cl www.latercera.com

- Cierre abrupto del fondo de Michael Burry, reconocido por anticipar la crisis del 2008.

- Apuesta contraria a la tendencia alcista de las gigantes tecnológicas impulsadas por la inteligencia artificial.

- Debate abierto sobre la sostenibilidad de las valoraciones actuales en Wall Street.

Michael Burry, el inversionista que se hizo famoso por su visión profética durante la crisis financiera de 2008, ha decidido cerrar su fondo de cobertura Scion Asset Management, dejando un mensaje claro: las valoraciones en Wall Street están desconectadas de los fundamentos económicos.

El anuncio, confirmado el 13 de noviembre, refleja una postura crítica en medio de un mercado dominado por el auge de las acciones tecnológicas, especialmente aquellas vinculadas a la inteligencia artificial (IA), que han alcanzado niveles récord. Burry informó a sus inversionistas que liquidará los activos y devolverá el capital antes de fin de año, manteniendo solo una pequeña reserva para auditorías e impuestos.

Este movimiento se suma a la retirada de otros vendedores en corto emblemáticos, como Jim Chanos y Nate Anderson, quienes también han cerrado sus firmas tras años de pérdidas frente a la escalada de los precios de las acciones. Sin embargo, la decisión de Burry no es un gesto de rendición, sino una advertencia.

En el corazón de esta historia está la apuesta abierta de Burry contra el optimismo tecnológico: ha tomado posiciones cortas (opciones de venta) contra empresas como Palantir y Nvidia, dos de las favoritas del mercado. Según datos regulatorios, su exposición supera los US$1.000 millones, un desafío directo a la narrativa dominante que venera el potencial transformador de la IA.

Desde la perspectiva de Burry, las valoraciones actuales —con un ratio precio/ganancias a futuro del Nasdaq Composite cercano a 30, muy por encima del promedio histórico de 25— son insostenibles. “Mi estimación del valor de los activos no está en sintonía con los mercados”, expresó en una carta fechada a fines de octubre.

Este diagnóstico se contrapone a la opinión de muchos inversionistas y analistas que ven en la inteligencia artificial una revolución comparable a la llegada de Internet, justificando las valoraciones elevadas. Para ellos, las empresas tecnológicas aún están en una fase de crecimiento exponencial, y el mercado simplemente refleja esa expectativa.

En Chile, expertos en finanzas y académicos han reaccionado con cautela. Algunos coinciden en que existe un riesgo latente de corrección, mientras otros advierten que la dinámica global y la innovación tecnológica podrían sostener estos niveles por más tiempo. “La historia nos ha enseñado que las burbujas pueden durar más de lo que esperamos, pero eventualmente la realidad se impone,” señala un economista local consultado para este análisis.

Por otro lado, voces desde el sector tecnológico defienden el optimismo actual, argumentando que la IA está reconfigurando industrias enteras y que la inversión en estas compañías es una apuesta legítima al futuro.

El cierre de Scion Asset Management también tiene implicancias prácticas para el mercado de inversionistas institucionales, ya que Burry era una figura influyente dentro del segmento de gestores que buscan oportunidades mediante análisis contracíclicos.

Finalmente, la historia de Michael Burry vuelve a poner en el centro del debate la tensión entre la especulación y el valor real, un clásico en los ciclos financieros. Mientras algunos actores apuestan por la continuidad de la euforia tecnológica, otros ven señales claras de riesgo y sobrevaloración.

En definitiva, el cierre del fondo de Burry y su apuesta contra el mercado tecnológico son un llamado a la prudencia y a la reflexión profunda sobre el estado actual de Wall Street. La pregunta que queda flotando es si esta advertencia será un presagio de un ajuste necesario o simplemente un eco desafiante en un mercado que parece no querer escuchar.

Fuentes: Diario Financiero, Bloomberg, SEC, entrevistas con economistas chilenos.