El ascenso de Parisi redefine el mapa político chileno: un fenómeno que obliga a repensar la representación

El ascenso de Parisi redefine el mapa político chileno: un fenómeno que obliga a repensar la representación
Actualidad
Política
2025-11-18
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- Parisi gana en cuatro regiones del norte, desplazando a los favoritos tradicionales.

- El Partido de la Gente recupera fuerza en el Congreso tras años de declive.

- El electorado parisiista desafía etiquetas y revela fracturas profundas en la política chilena.

El domingo 16 de noviembre de 2025, el escenario político chileno mostró una vez más una realidad que muchos prefirieron no ver. Franco Parisi, líder del Partido de la Gente (PDG), obtuvo el tercer lugar en la elección presidencial con un 19,71% de los votos y ganó en las cuatro regiones más al norte del país: Arica y Parinacota, Tarapacá, Antofagasta y Atacama. Este resultado no es un accidente ni una anomalía pasajera, sino la expresión de un descontento territorial y social que ha ido madurando durante años.

En comunas pequeñas y urbanas por igual, Parisi no solo superó a candidatos con mayor trayectoria y respaldo tradicional, sino que consolidó un electorado que se siente "dejado atrás", "sin voz" y escéptico respecto a la política institucional. En Ollagüe, por ejemplo, obtuvo un 58,17% de los votos, y en Colchane un 57,3%, cifras que evidencian un arraigo territorial profundo y poco explorado por los análisis convencionales.

Un fenómeno difícil de encasillar
El fenómeno Parisi desafía las categorías políticas tradicionales. Para sectores de derecha y centro, su discurso anti-élite y meritocrático es un ruido molesto que se tilda de populismo digital, mientras que para la izquierda representa un desafío a su hegemonía en ciertos territorios. "Parisi no es ni facho ni comunacho", como se ha repetido en la prensa, refleja una identidad política que trasciende el espectro clásico y se ancla en emociones y experiencias de exclusión.

Este electorado no responde a programas extensos ni a promesas complejas, sino a una narrativa simple y directa: "Los dejaron atrás; yo los escucho". Esta frase, repetida por Parisi, ha calado en regiones donde la presencia estatal es intermitente y donde la política tradicional parece un idioma ajeno.

El salto del Partido de la Gente en el Congreso
El impacto de Parisi trasciende la presidencial. El PDG logró recuperar representación parlamentaria con 14 diputados electos para el período 2026-2030, sumando más de 1,2 millones de votos en la elección de diputados y cerca de 325 mil en senadores. Este crecimiento contrasta con la crisis interna que el partido vivió en 2024, cuando perdió toda su bancada debido a renuncias y expulsiones.

Entre los diputados electos destacan figuras como Pamela Jiles, quien se sumó al PDG para la reelección, y Zandra Parisi, hermana del candidato presidencial. La bancada que emerge promete ser un actor relevante en la próxima legislatura, con representación en regiones claves como Antofagasta, Atacama, Coquimbo, Valparaíso, Maule, Biobío y La Araucanía.

Perspectivas encontradas y desafíos para el balotaje
El electorado de Parisi se ha convertido en el foco de atención para los candidatos que pasaron a segunda vuelta: José Antonio Kast (Partido Republicano) y Jeannette Jara (Partido Comunista). Ambos deberán negociar y adaptar sus estrategias para captar a un votante que se siente desconectado de las ofertas políticas convencionales.

Desde la derecha, se reconoce que Parisi aventajó a Kast en cinco regiones, con diferencias notables en Antofagasta y Atacama, mientras que desde la izquierda se valora el potencial de atraer a un electorado que, aunque crítico, comparte ciertas demandas sociales.

Conclusiones y consecuencias visibles
El fenómeno Parisi no debe interpretarse como un simple accidente electoral ni como un ruido pasajero, sino como un síntoma de una fragmentación política más profunda. "Parisi no es una anomalía, sino la expresión de un malestar territorial y social que la política institucional ha ignorado", señala Natalia Piergentili, directora de Asuntos Públicos de Feedback.

Este resultado obliga a repensar la representación política en Chile, entendiendo que existe un electorado que no se siente representado por las categorías tradicionales y que busca respuestas simples a problemas complejos. La irrupción de Parisi evidencia la erosión de la confianza en las instituciones y la necesidad de políticas que conecten con las experiencias reales de las regiones más postergadas.

En definitiva, la elección de 2025 marca un punto de inflexión que no solo redefine el mapa político, sino que desafía a las fuerzas políticas a comprender y dialogar con una ciudadanía que reclama ser escuchada y considerada en su diversidad y complejidad.

Fuentes: La Tercera, Servicio Electoral de Chile, Feedback, análisis de Camilo Feres (Descifra).