La derecha chilena se reorganiza: apoyos sin fisuras y alianzas regionales en la antesala del balotaje

La derecha chilena se reorganiza: apoyos sin fisuras y alianzas regionales en la antesala del balotaje
Actualidad
Política
2025-11-18
Fuentes
www.latercera.com www.latercera.com www.latercera.com www.latercera.com www.latercera.com www.latercera.com www.latercera.com elpais.com elpais.com www.latercera.com www.latercera.com www.dw.com www.latercera.com www.latercera.com

- Unidad estratégica de Renovación Nacional y figuras clave de la centroderecha en apoyo a Kast.

- Redes internacionales activadas con líderes de derecha latinoamericana.

- Tensiones internas y reconciliaciones que dibujan la nueva geografía política del sector.

Un escenario en plena efervescencia política se despliega en Chile a un mes del balotaje presidencial del 14 de diciembre. La derecha, fragmentada tras la primera vuelta, ha puesto en marcha un proceso de consolidación que, lejos de ser un mero trámite electoral, exhibe la complejidad y la urgencia de un sector que busca evitar la continuidad del actual gobierno y reposicionarse como fuerza mayoritaria.

El martes 18 de noviembre, Renovación Nacional (RN) formalizó su apoyo institucional al candidato republicano José Antonio Kast, comprometiendo toda su estructura territorial, desde militantes hasta autoridades locales y parlamentarios. La decisión, tomada en un Consejo General extraordinario, se fundamenta en la percepción de un desgaste profundo del gobierno en materia social, económica y de seguridad, que el partido atribuye a la actual administración. “Tenemos el deber de trabajar desde ya por la opción que represente un cambio de rumbo para Chile”, afirmaron desde RN.

Este respaldo se suma a gestos previos y posteriores de figuras clave de la centroderecha. La alcaldesa de Las Condes, Catalina San Martín, quien días antes había condicionado su apoyo a Kast a conversaciones previas, finalmente se pronunció sin condiciones a favor del republicano. En su mensaje público, destacó que el desafío es claro: “continuidad o cambio”, y llamó a construir una centroderecha que ofrezca un proyecto esperanzador, meritocrático y mayoritario.

Este viraje de San Martín refleja las tensiones internas y la disonancia cognitiva dentro del sector, donde se debate entre preservar identidades políticas y la necesidad pragmática de unidad frente a la segunda vuelta. Su advertencia contra un posible “Socialismo Democrático 2.0” y su llamado a sentarse a conversar inmediatamente tras la elección subrayan la incertidumbre y el pragmatismo que atraviesan a la centroderecha.

En paralelo, el propio José Antonio Kast ha activado una red de contactos regionales que busca fortalecer su perfil como líder de la derecha latinoamericana. En las últimas 48 horas, Kast sostuvo conversaciones con los presidentes de Argentina, Javier Milei, y de Paraguay, Santiago Peña. En estos diálogos se abordaron temas de integración, desarrollo y una agenda común basada en la libertad, la seguridad y el progreso económico.

Este despliegue internacional no es fortuito. En un contexto regional donde varios países han virado hacia la derecha, el aspirante chileno intenta consolidar alianzas que podrían ser clave en caso de acceder a La Moneda. Desde su entorno no descartan nuevas conversaciones con otros líderes del continente, buscando instalarse como un referente regional.

La unidad en la derecha también se ha expresado en gestos simbólicos. Tras la primera vuelta, el exabanderado del Partido Nacional Libertario, Johannes Kaiser, subió al escenario para respaldar a Kast, gesto que fue valorado por el candidato republicano y que refuerza la idea de un bloque consolidado. Kast ha reiterado su llamado a la unidad, enfatizando que lo que se requiere es recuperar la nación y avanzar con estabilidad y crecimiento.

Sin embargo, esta aparente cohesión no elimina las tensiones internas ni las diferencias ideológicas que persisten. La derecha chilena enfrenta el desafío de amalgamar un electorado diverso, desde sectores más moderados hasta los más conservadores y libertarios, sin desdibujar sus identidades políticas. La presión por evitar un triunfo del bloque de izquierda, que llevará a Jeannette Jara, del Partido Comunista, a la segunda vuelta, actúa como catalizador pero también como fuente de incertidumbre sobre el rumbo futuro del sector.

El contexto nacional revela un desgaste del actual gobierno en temas sociales, económicos y de seguridad, según la derecha, mientras la izquierda observa con cautela el avance del republicano. La narrativa de Kast como un candidato “al estilo Trump”, destacada incluso por medios internacionales como The New York Times, añade un componente de polarización que influye en la percepción ciudadana y en la estrategia de ambos bloques.

En definitiva, la derecha chilena se encuentra en una encrucijada que trasciende el simple apoyo electoral. El proceso de unidad, la activación de redes regionales y las tensiones internas configuran un escenario donde la batalla por el balotaje es también una disputa por la identidad y el proyecto político del sector para los próximos años.

Este episodio refleja verdades irrefutables: la política chilena se mueve entre la urgencia de cambios y la resistencia a la continuidad, entre la fragmentación y la búsqueda de unidad, y entre la influencia regional y las particularidades nacionales. La construcción de un proyecto mayoritario en la centroderecha dependerá, en gran medida, de cómo se gestionen estas contradicciones y de la capacidad para ofrecer un relato coherente y atractivo para un electorado que demanda certezas y estabilidad.

Fuentes: La Tercera, The New York Times, declaraciones públicas de Renovación Nacional, Catalina San Martín, José Antonio Kast y Johannes Kaiser.