
Una ciudad en ebullición térmica
El 18 de noviembre de 2025, Santiago registró temperaturas que alcanzaron los 33 grados Celsius en sectores como Quilicura y Colina, según reportó la Dirección Meteorológica de Chile (DMC). Este pico de calor extremo, que se prolongó por varios días, no solo activó las alarmas en la salud pública y el suministro energético, sino que también reabrió una discusión que parecía dormida: ¿qué tan preparado está Chile para enfrentar estas nuevas realidades climáticas?
El origen y evolución del fenómeno
Desde finales de octubre, la capital experimentó un aumento gradual de las temperaturas que, según expertos como Arnaldo Zúñiga de la DMC, no era casualidad. 'Estamos viendo un patrón que se repite con mayor frecuencia: olas de calor más intensas y prolongadas en la zona central', explicó en una entrevista previa al peak de calor. Los registros meteorológicos confirman que desde fines de septiembre ya se anticipaba este aumento térmico, con máximas llegando a los 30 grados a mediados de noviembre.
Perspectivas encontradas: ciencia, política y ciudadanía
En el escenario político, las voces se dividieron. Por un lado, sectores ambientalistas y científicos señalaron que este evento es una manifestación palpable del cambio climático global, producto de la acumulación de gases de efecto invernadero y la falta de políticas efectivas para mitigar sus efectos. María González, climatóloga de la Universidad de Chile, afirmó: 'No podemos seguir viendo estos episodios como hechos aislados; son la nueva normalidad y requieren respuestas urgentes.'
Sin embargo, algunos representantes políticos y actores económicos cuestionaron la urgencia de las medidas propuestas, argumentando que las olas de calor son fenómenos naturales dentro de la variabilidad climática y que el país debe equilibrar desarrollo con sostenibilidad. El diputado Jaime Fuentes indicó: 'No podemos paralizar la economía por cada episodio climático, necesitamos soluciones que no afecten la competitividad.'
En la voz ciudadana, la experiencia fue diversa. Comunas con menor infraestructura y acceso a servicios básicos reportaron mayores dificultades para sobrellevar el calor, especialmente adultos mayores y niños. Una vecina de La Pintana comentó: 'No tenemos aire acondicionado ni espacios verdes suficientes, el calor nos afecta mucho más.' Mientras tanto, sectores acomodados contaron con recursos para mitigar el impacto, evidenciando una brecha social que el cambio climático solo profundiza.
Consecuencias visibles y lecciones para el futuro
El sistema eléctrico enfrentó picos de demanda, poniendo en jaque la estabilidad del suministro durante las horas de mayor calor. A nivel sanitario, hubo un aumento en las consultas por golpes de calor y deshidratación, especialmente en grupos vulnerables. En términos urbanos, la falta de áreas verdes y la alta concentración de cemento y asfalto agravaron la sensación térmica, un fenómeno conocido como 'isla de calor urbana'.
Este episodio ha dejado claro que la adaptación al cambio climático es un desafío multidimensional que requiere coordinación entre ciencia, política y sociedad. La evidencia acumulada no permite ya ignorar la necesidad de políticas públicas robustas que incluyan desde la planificación urbana hasta la educación ciudadana y la inversión en energías renovables.
Verdades innegables y caminos abiertos
El calor extremo que vivió Santiago no es un hecho aislado ni un capricho meteorológico. Es la expresión concreta de una tendencia global que golpea con fuerza local. La polarización en torno a sus causas y soluciones refleja tensiones sociales y económicas profundas, pero también la oportunidad de construir consensos sobre la urgencia climática.
Lo que queda claro, tras semanas de análisis y testimonios, es que el futuro del clima en Chile ya está aquí, y con él, la necesidad de enfrentar con decisión y justicia social los retos que impone el calentamiento global.
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Fuentes: Dirección Meteorológica de Chile, Cooperativa.cl, Meganoticias, entrevistas a expertos y testimonios ciudadanos recopilados durante noviembre de 2025.
2025-08-06