
En un giro político que ha resonado con fuerza en los pasillos del poder y en las bases de la derecha chilena, el senador Alejandro Kusanovic, militante de Renovación Nacional (RN), anunció públicamente en agosto de 2025 su apoyo a José Antonio Kast, candidato presidencial del Partido Republicano. Esta decisión no solo desafía la disciplina del bloque Chile Vamos, sino que también expone la fragilidad y las dudas que rodean la candidatura de Evelyn Matthei, la carta oficial de RN.
Kusanovic declaró que Matthei "ha estado muy dubitativa" y que "le falta ser ella misma", acusándola de estar sometida a la influencia de un grupo cercano al gobierno de Sebastián Piñera, lo que, a su juicio, ha diluido su autenticidad y capacidad de liderazgo. En sus palabras, Kast representa una alternativa con un carácter distinto, alejado de las estructuras tradicionales que dominan la derecha chilena.
Desde la perspectiva de Kusanovic, la fidelidad al partido no puede estar por encima de la libertad de expresión y la coherencia ideológica. "Si tengo que renunciar al partido, renunciaré", afirmó con determinación, enfatizando que no se dejará amedrentar por amenazas o presiones internas.
Este apoyo explícito a Kast ha dividido opiniones dentro de RN y el conglomerado Chile Vamos. Por un lado, sectores más conservadores y críticos de la gestión política tradicional ven en Kast una figura capaz de revitalizar la derecha con propuestas claras y un liderazgo fuerte. Por otro, la dirigencia oficialista y parte de la militancia consideran que esta ruptura puede debilitar la unidad electoral y favorecer a candidatos de otras coaliciones.
En regiones, la reacción ha sido igualmente diversa. Mientras algunos dirigentes locales respaldan la postura de Kusanovic como un acto de valentía frente a un escenario político incierto, otros temen que esta fractura profundice la desconfianza ciudadana hacia los partidos y complique la gobernabilidad futura.
Desde el mundo académico y analistas políticos, el episodio es interpretado como un reflejo de la tensión interna que atraviesa la derecha chilena en un contexto electoral marcado por la polarización y la búsqueda de nuevos liderazgos. La disonancia entre la necesidad de renovación y la resistencia al cambio se manifiesta en esta pugna abierta entre Matthei y Kast, con Kusanovic como uno de los protagonistas más visibles.
Hasta la fecha, Matthei ha optado por mantener una postura cautelosa, evitando confrontaciones directas y buscando recomponer su imagen y base de apoyo. Sin embargo, la sombra de la duda sobre su candidatura persiste, alimentada por la baja en las encuestas y la pérdida de confianza en sectores clave.
En definitiva, esta disputa interna revela verdades incómodas: la derecha chilena enfrenta un momento de redefinición donde la lealtad partidaria se tensiona frente a las convicciones personales y la urgencia de conectar con un electorado cambiante. Las consecuencias de esta fractura serán decisivas para el rumbo político del país en los próximos años, marcando un escenario donde la unidad ya no es un valor dado, sino un desafío a construir o a perder.
Fuentes consultadas incluyen declaraciones del propio senador Alejandro Kusanovic para Cooperativa.cl, análisis de expertos en política chilena y reportes de medios nacionales que han seguido la evolución de la candidatura presidencial de Chile Vamos.