La Jaraneta al Poder:Anatomía de una Primaria que Redibujó el Mapa de la Izquierda y Desafió al Poder Establecido

La Jaraneta al Poder:Anatomía de una Primaria que Redibujó el Mapa de la Izquierda y Desafió al Poder Establecido
2025-07-13
  • La victoria decisiva de Jeannette Jara (PC) estableció la hegemonía del Partido Comunista en la izquierda, desplazando al gobernante Frente Amplio.
  • El resultado provocó una fractura en la centroizquierda, con la Democracia Cristiana negando su apoyo y figuras del Socialismo Democrático mostrando un alineamiento tibio.
  • La campaña de Jara enfrenta ahora el desafío de unificar una coalición fragmentada, equilibrando su mandato transformador con gestos pragmáticos hacia el centro político.

Inicio Contextualizado: El Terremoto Político de Invierno

A más de dos meses de las primarias oficialistas del 29 de junio, el sismo político que provocaron sigue reconfigurando el terreno. La victoria de Jeannette Jara (PC) no fue un mero resultado electoral; fue la consolidación de un nuevo epicentro de poder en la izquierda chilena. Con una contundencia que sorprendió a analistas y a sus propios contendores, la exministra del Trabajo se alzó con más del 60% de los votos, dejando atrás no solo a sus rivales, sino también a una era de hegemonía del Frente Amplio (FA) y del Socialismo Democrático (SD).

Hoy, con la carrera presidencial en marcha, las consecuencias de esa jornada son visibles: una izquierda liderada por el Partido Comunista por primera vez en 25 años, un Frente Amplio sumido en una profunda crisis de identidad y una centroizquierda tradicional enfrentada al dilema de apoyar un proyecto que, para muchos de sus históricos, resulta ajeno.

Desarrollo Analítico: Crónica de un Desplazamiento de Poder

La noche del 29 de junio tuvo dos caras. Por un lado, la celebración en el comando de Jara, cuya campaña logró movilizar a una base que, según análisis posteriores, multiplicó por casi 15 veces el padrón de militantes de su partido. Fue una demostración de disciplina y capacidad organizativa que contrastó fuertemente con la desafección que golpeó a sus competidores.

La otra cara fue la de la derrota. Para el Frente Amplio, fue una "debacle", como la calificó la prensa. Su candidato, el diputado Gonzalo Winter, apenas superó el 11% de los votos. El dato es demoledor: el partido del Presidente Gabriel Boric perdió el 88% del caudal de votos que el propio mandatario había conseguido en las primarias de 2021. En comunas emblemáticas para el FA, como Ñuñoa, la votación de Winter apenas superó en 182 sufragios a la cantidad de militantes inscritos, una señal inequívoca de que ni su propia base se movilizó por él. La derrota de Carolina Tohá (PPD), aunque menos catastrófica en números (27.72%), fue igualmente significativa, pues representó el fracaso del Socialismo Democrático en su intento por liderar la coalición y moderar su rumbo.

Perspectivas Contrastadas: El Desafío de Unir los Fragmentos

El triunfo de Jara desató una serie de realineamientos y fracturas que hoy definen el escenario. Lejos de una unidad automática, el oficialismo entró en un período de tensión y negociación.

  • El Pragmatismo de la Candidata: Consciente de la necesidad de ampliar su base, Jeannette Jara ha realizado gestos estratégicos hacia el centro. El más notable fue la incorporación a su equipo del exministro de Hacienda Nicolás Eyzaguirre, una figura emblemática de los gobiernos de la Concertación y quien había apoyado a Tohá. Este movimiento busca calmar las aprensiones del mundo económico y atraer a un electorado moderado, generando una disonancia constructiva: ¿es posible conciliar la tradición económica de la centroizquierda con el programa transformador del PC?
  • La Centroizquierda en la Encrucijada: La reacción del resto de la coalición ha sido heterogénea. El presidente de la Democracia Cristiana, Alberto Undurraga, dio un "portazo" inmediato, afirmando que su partido no puede apoyar una candidatura comunista. Sin embargo, esta postura no es monolítica; figuras como el diputado Eric Aedo (DC) han anunciado su respaldo personal a Jara, evidenciando una profunda división interna. Desde el Socialismo Democrático, el apoyo ha sido más protocolar que entusiasta. La propia Carolina Tohá, si bien reconoció la victoria, anunció que se alejaría de la "primera línea" de la campaña, una toma de distancia sutil pero elocuente. Otros, como el exsenador Felipe Harboe, han sido más directos, calificando la propuesta de Jara como una "ideología de museo" a la que no adherirán.
  • El Frente Amplio en la Sombra: Para el conglomerado gobernante, el resultado fue un baño de humildad. Tras reconocer la derrota, se cuadraron rápidamente con la candidatura de Jara, pero desde una posición de debilidad. Su capacidad de influencia en el programa de gobierno y en la campaña presidencial se ha visto drásticamente reducida, pasando de ser la fuerza hegemónica a un socio minoritario del Partido Comunista.

Contexto Estructural: El Veredicto de las Urnas a un Ciclo Político

El resultado de la primaria no puede entenderse como un hecho aislado. Es el corolario de un ciclo político marcado por las altas expectativas del estallido social de 2019, los dos procesos constitucionales fallidos y el desgaste del gobierno del Presidente Boric. La elección funcionó como un referéndum sobre las dos almas del oficialismo. El electorado de izquierda pareció castigar la gestión del Frente Amplio, percibida por algunos como errática o insuficiente, y premiar la coherencia y capacidad de movilización del Partido Comunista, que supo capitalizar su rol como pilar de reformas clave desde el Ministerio del Trabajo.

Estado Actual: La "Jaraneta" en Ruta, un Camino por Pavimentar

Hoy, la candidatura de Jeannette Jara avanza, pero sobre un camino lleno de complejidades. Su principal desafío es transformar una victoria de nicho, por contundente que fuera, en una mayoría nacional. Para ello, debe resolver la cuadratura del círculo: mantener el fervor de su base, que votó por un programa de cambios profundos como el fin de las AFP, mientras suma a los sectores moderados y de centro que la miran con desconfianza. La unidad de la izquierda y la centroizquierda, que en el papel parece sellada, en la práctica es un pacto frágil que será puesto a prueba en cada etapa de la campaña presidencial. La "Jaraneta" está en marcha, pero su llegada a La Moneda dependerá de su habilidad para navegar un mapa político que ella misma contribuyó a redibujar.

El evento representa un punto de inflexión en el panorama político, marcando el ascenso de una nueva figura y la reconfiguración de las alianzas de poder dentro de la coalición gobernante. Sus consecuencias, ahora visibles, permiten un análisis profundo sobre las corrientes ideológicas, las estrategias electorales y el cambio en el liderazgo político, ofreciendo una narrativa completa con un claro antes, durante y después.