Eliminar el Fondo ESR: un retroceso para las regiones y la educación pública - Las universidades regionales en jaque tras la exclusión presupuestaria

Eliminar el Fondo ESR: un retroceso para las regiones y la educación pública - Las universidades regionales en jaque tras la exclusión presupuestaria
Actualidad
Educación
2025-11-27
Fuentes
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- Eliminación de un programa clave para la educación superior regional.

- Conflicto entre evaluación estatal y realidad territorial.

- Impacto directo en comunidades y universidades fuera de la Región Metropolitana.

El Fondo de Educación Superior Regional (ESR), creado para fortalecer la vinculación territorial y la extensión universitaria en regiones históricamente postergadas, enfrenta un golpe decisivo con su exclusión del Proyecto de Ley de Presupuestos 2026. El 14 de noviembre de 2025, la Dirección de Presupuestos (DIPRES) publicó un informe que calificó al programa como de “mal desempeño” y propuso su eliminación. Esta medida ha desatado una ola de preocupación en las universidades regionales y en las comunidades que se han beneficiado de sus recursos, poniendo en riesgo décadas de avances en la democratización del conocimiento y la equidad territorial.

Un programa con raíces y resultados

Concebido inicialmente para las universidades agrupadas en la Agrupación de Universidades Regionales (AUR) y luego extendido a los Centros de Formación Técnica Estatales, el Fondo ESR ha asignado en 2025 más de $12.440 millones para impulsar proyectos que abarcan desde la educación hasta la salud comunitaria, la economía campesina y la cultura regional. Estos recursos han permitido consolidar a las universidades regionales como agentes activos de desarrollo sostenible y cohesión social.

Sin embargo, el informe de DIPRES pone el foco en deficiencias administrativas y de gestión, especialmente en la Subsecretaría de Educación Superior, señalando la ausencia de indicadores claros, mecanismos de evaluación sistemáticos y la falta de acciones correctivas oportunas. La crítica apunta a un diseño y gobernanza institucional mejorables, pero no cuestiona el compromiso ni la gestión territorial de las universidades beneficiarias.

Voces en pugna: entre la crítica y la defensa

Desde la AUR, la rectora Luperfina Rojas Escobar advierte que la eliminación del Fondo ESR sería un retroceso que debilitaría la capacidad de las universidades regionales para actuar en sus territorios y privaría a las comunidades de iniciativas culturales, sociales y productivas que mejoran su calidad de vida. 'Mantener y fortalecer este programa no debe ser una cuestión presupuestaria, sino una decisión de política pública con implicancias estructurales para la cohesión nacional', sostiene.

Por otro lado, las autoridades estatales y algunos sectores técnicos defienden la necesidad de perfeccionar el programa, corrigiendo sus falencias administrativas para optimizar el uso de los recursos públicos. La tensión radica en encontrar un equilibrio entre la eficiencia burocrática y la continuidad de una política que ha demostrado impacto social.

Consecuencias visibles y desafíos futuros

La eliminación del Fondo ESR no es un mero ajuste presupuestario; implica una ruptura en el vínculo entre las universidades regionales y sus comunidades, con efectos que ya empiezan a sentirse en proyectos suspendidos y en la incertidumbre sobre el futuro de la educación superior en regiones.

La paradoja es que, mientras las encuestas reflejan un alto nivel de confianza y valoración social hacia las universidades regionales, el Estado decide prescindir de un instrumento que ha cimentado esa legitimidad. Esta decisión pone en entredicho los compromisos declarados de descentralización, equidad territorial y fortalecimiento de la educación pública.

Reflexión final

El caso del Fondo ESR revela una disonancia entre la evaluación técnica y la realidad territorial, entre la lógica administrativa y la experiencia comunitaria. La discusión no debe reducirse a números ni a informes, sino abrirse a un debate amplio que reconozca la educación superior como un bien público con raíces regionales.

En definitiva, 'apostar por el conocimiento con arraigo territorial es apostar por un Chile más equilibrado, justo y consciente de su diversidad'. La eliminación del Fondo ESR, sin un plan claro de reemplazo o mejora, representa un riesgo para esa visión y un desafío para la política pública educativa.

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Fuentes:

- Informe de Evaluación de 20 Programas Públicos, Dirección de Presupuestos (DIPRES), 2025-11-14

- Declaraciones de la Agrupación de Universidades Regionales (AUR)

- Publicación en La Tercera, 14 de noviembre de 2025