Acuerdo Extrajudicial entre FNE y San Bernardo: ¿Un avance real para la libre competencia o un arreglo simbólico?

Acuerdo Extrajudicial entre FNE y San Bernardo: ¿Un avance real para la libre competencia o un arreglo simbólico?
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Justicia Tribunales
2025-11-28
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- Reconocimiento formal de prácticas restrictivas en el mercado local de taxis colectivos.

- Multa simbólica y compromisos para evitar futuras conductas anticompetitivas.

- Dilema entre sanción y eficacia en un contexto de microempresas con limitados recursos.

El escenario estaba montado desde hace años. En 2009, trece líneas de taxis colectivos de San Bernardo firmaron un Protocolo de Acuerdo con la Municipalidad local que condicionó la competencia en el mercado de transporte público. Este documento estableció que solo podrían postular a servicios que ya prestaban, mientras el municipio les daría prioridad en trámites y autorizaciones. La investigación de la Fiscalía Nacional Económica (FNE) confirmó que este pacto generó un ambiente de exclusión para nuevos operadores, afectando la libre competencia durante más de una década.

El 29 de octubre de 2025, el Tribunal de Defensa de la Libre Competencia (TDLC) acogió un Acuerdo Extrajudicial entre la FNE, la Municipalidad de San Bernardo y las líneas involucradas. El pacto implica el reconocimiento de los hechos, el pago de una multa cercana a $13 millones y el compromiso de cesar conductas restrictivas, prohibir el intercambio de información estratégica y realizar capacitaciones en libre competencia.

Desde la perspectiva del fiscal nacional económico, Jorge Grunberg, este acuerdo representa una vía "efectiva y eficiente" para cautelar la libre competencia, evitando un juicio largo y costoso. Destacó que las empresas investigadas son microempresas con limitada capacidad económica y que no hubo intención de ocultar la conducta ni conocimiento pleno de la normativa.

"Este acuerdo nos permite poner término a una investigación con clara evidencia de una conducta indeseable desde la perspectiva de libre competencia," afirmó Grunberg, subrayando que el mecanismo busca asegurar un comportamiento conforme a la ley en adelante.

Sin embargo, las reacciones no se hicieron esperar. Desde organizaciones de defensa del consumidor y algunos sectores políticos, se cuestionó la eficacia real de la sanción, calificándola de simbólica frente al daño que la conducta pudo haber causado en términos de competencia y calidad del servicio.

Una voz crítica de la sociedad civil señaló: "Multar con $13 millones a un grupo que pudo haber restringido el acceso de nuevos competidores durante años parece más un gesto que un castigo. Esto no resuelve las barreras estructurales que enfrentan los usuarios y nuevos operadores."

Por otro lado, representantes municipales y de las líneas de taxis colectivos defendieron el acuerdo, argumentando que la colaboración con la FNE y el compromiso asumido son pasos necesarios para regularizar prácticas y mejorar la transparencia en el sector.

El contexto local es clave para entender este desenlace. El mercado de taxis colectivos en San Bernardo está dominado por pequeñas empresas con escasa capacidad para enfrentar procesos judiciales largos y complejos. La FNE optó por una solución pragmática para asegurar el cese de conductas anticompetitivas y promover una cultura de cumplimiento.

No obstante, expertos en libre competencia advierten que, sin un seguimiento riguroso y medidas estructurales que faciliten la entrada de nuevos operadores, el acuerdo corre el riesgo de ser un parche temporal que no resuelve las causas profundas del problema.

A casi un mes de la firma del acuerdo, aún queda pendiente observar si las medidas acordadas se traducen en cambios concretos en la dinámica del mercado y en una mejora real para los usuarios de transporte público en San Bernardo.

En definitiva, este episodio expone el delicado equilibrio entre sancionar y promover la competencia en mercados locales con actores pequeños y limitados recursos. Mientras la FNE y el TDLC apuestan por mecanismos alternativos para acelerar la resolución de conflictos, la sociedad sigue expectante ante los resultados concretos y el impacto tangible en la calidad y diversidad del servicio.

La historia de San Bernardo y sus taxis colectivos abre un debate mayor: ¿pueden las microempresas convivir con reglas claras y competitivas sin perder su esencia? ¿O estos acuerdos extrajudiciales terminan siendo un mero formalismo que no transforma las dinámicas de poder en mercados cerrados? El tiempo y la vigilancia ciudadana lo dirán.

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Fuentes consultadas: Fiscalía Nacional Económica (FNE), Tribunal de Defensa de la Libre Competencia (TDLC), La Tercera (29/10/2025), declaraciones de Jorge Grunberg.

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