Trump amenaza con quitar la exención fiscal a Harvard: un pulso entre política y educación que trasciende fronteras

Trump amenaza con quitar la exención fiscal a Harvard: un pulso entre política y educación que trasciende fronteras
Internacional
Estados Unidos
2025-11-28
Fuentes
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- Conflicto político entre el expresidente Donald Trump y una de las universidades más prestigiosas del mundo.

- Acusaciones cruzadas sobre ideologías, antisemitismo y libertad académica.

- Impacto económico y legal con congelamiento de fondos y demandas en juego.

Un choque frontal entre poder político y academia se ha desarrollado en Estados Unidos desde mayo pasado, cuando el expresidente Donald Trump anunció que la Universidad de Harvard perdería su exención fiscal, un privilegio que le permite operar sin pagar impuestos sobre sus ingresos como institución educativa.El 2 de mayo de 2025, Trump hizo pública esta amenaza a través de sus redes sociales, en medio de un clima de tensión creciente entre sectores conservadores y universidades de élite.

La génesis de esta disputa se remonta a años de críticas por parte de figuras conservadoras que acusan a Harvard y otras instituciones similares de promover agendas ideológicas liberales y de permitir un aumento del antisemitismo en sus campus, especialmente tras las protestas estudiantiles vinculadas al conflicto en Gaza. “Le quitaremos a Harvard la exención de impuestos. ¡Es lo que se merecen!”, afirmó Trump, poniendo en jaque la tradicional autonomía universitaria.

Por su parte, Harvard ha respondido con la publicación de informes internos que reconocen episodios de antisemitismo y prejuicios contra musulmanes, reflejando un ambiente tenso pero también un compromiso explícito con la colaboración y la mejora continua. “Lamento los momentos en los que no estuvimos a la altura de nuestras propias expectativas”, admitió el rector Alan Garber, en una carta que acompañó estos documentos.

El enfrentamiento escaló cuando la administración congeló miles de millones de dólares destinados a investigaciones científicas en áreas como la esclerosis lateral amiotrófica y la tuberculosis, afectando proyectos de alcance global. La universidad, en respuesta, inició demandas legales contra agencias federales y funcionarios, denunciando una instrumentalización política que pone en riesgo la independencia académica.

Desde el ámbito político, las posturas se dividen con claridad. La senadora demócrata Elizabeth Warren calificó la amenaza de Trump como “rotundamente ilegal”, defendiendo la autonomía universitaria y advirtiendo sobre las consecuencias de politizar la exención fiscal. En cambio, sectores conservadores insisten en que las universidades deben rendir cuentas por sus supuestas agendas políticas y por no controlar adecuadamente los discursos de odio en sus comunidades.

En términos legales, la situación es compleja. Aunque el código del Servicio de Impuestos Internos (IRS) impide la interferencia directa de un presidente en decisiones tributarias, el comisionado del IRS depende del secretario del Tesoro, lo que deja abierta la posibilidad de influencia política en el proceso. Esto ha generado un debate sobre la separación de poderes y la independencia de las instituciones públicas.

A seis meses del anuncio, la exención fiscal de Harvard sigue en suspenso, mientras el pulso entre la universidad y el gobierno estadounidense continúa sin un desenlace claro.

Este conflicto no solo refleja una disputa puntual, sino que pone en evidencia tensiones más profundas en la sociedad estadounidense: la polarización política, el rol de la educación superior en la formación de valores y la fragilidad de las instituciones frente a presiones externas.

Para la comunidad académica y la sociedad civil, las consecuencias son palpables. La incertidumbre sobre el financiamiento de investigaciones críticas puede ralentizar avances científicos, mientras que la instrumentalización política de temas educativos puede erosionar la confianza pública en las universidades.

En definitiva, este enfrentamiento es una tragedia colectiva donde todos pierden: la educación, la ciencia y el diálogo democrático. La historia de este pulso entre Trump y Harvard invita a reflexionar sobre los límites del poder político y la necesidad de preservar espacios libres para el pensamiento crítico y la diversidad cultural.

Fuentes consultadas incluyen reportajes de Bloomberg, declaraciones oficiales de Harvard, análisis de expertos legales y pronunciamientos políticos de ambos lados del espectro estadounidense.