FNE aprueba acuerdo entre Codelco y SQM: un paso hacia la estabilidad con riesgos latentes

Un pacto que reconfigura el mercado del litio en Chile ha sido aprobado con condiciones por la Fiscalía Nacional Económica (FNE), marcando un antes y un después en la industria minera nacional. El 24 de abril de 2025, la FNE autorizó un joint venture entre Codelco y SQM para la extracción, producción y comercialización de minerales del Salar de Atacama, principalmente hidróxido y carbonato de litio. Sin embargo, esta aprobación viene acompañada de una batería de medidas diseñadas para evitar que la operación reduzca la competencia y genere riesgos de coordinación indebida entre los actores del mercado.

Una alianza con dos caras

El acuerdo contempla un control dual: SQM administrará el joint venture entre 2025 y 2030, mientras que Codelco tomará el mando desde 2031 hasta 2060. Esta estructura temporal refleja una estrategia que busca aprovechar la experiencia privada inicial y la fortaleza estatal en el largo plazo, pero también despierta inquietudes sobre el equilibrio entre ambos sectores y la dinámica competitiva futura.

Voces enfrentadas: ¿estabilidad o concentración?

Desde el mundo político y empresarial, las opiniones se dividen con claridad. Por un lado, sectores que privilegian la estabilidad y el desarrollo estratégico del litio valoran el acuerdo como un paso hacia la consolidación de Chile como líder mundial en este recurso clave para la transición energética. “Este joint venture representa una oportunidad para potenciar la producción nacional y asegurar la participación estatal en un mercado global estratégico”, señaló un representante del Ministerio de Minería.

En contraste, organizaciones de defensa de la libre competencia y algunos actores regionales alertan sobre los posibles riesgos de concentración y pérdida de pluralidad en el mercado. “La creación de un vínculo estructural entre dos gigantes del litio puede limitar la entrada de nuevos competidores y afectar los precios a mediano plazo”, advierte un experto en regulación económica.

Medidas de mitigación y fiscalización: un delicado equilibrio

La FNE no aprobó el acuerdo sin condiciones. Las medidas incluyen restricciones estrictas sobre la participación simultánea de directores y ejecutivos en empresas competidoras (interlocking), compromisos de no compartir información comercial sensible y reportes periódicos para monitorear el cumplimiento. Estas disposiciones buscan prevenir prácticas colusorias y preservar un mercado competitivo.

Además, la FNE inició una investigación paralela para detectar posibles infracciones en el mercado de productos potásicos, lo que muestra una vigilancia activa sobre sectores conexos y complementarios.

Consecuencias y aprendizajes

Este acuerdo pone en evidencia la complejidad de equilibrar el desarrollo estratégico de recursos naturales con la necesidad de mantener mercados abiertos y competitivos. La operación no solo redefine el mapa del litio en Chile, sino que también plantea un desafío regulatorio que deberá ser monitoreado con rigor en los próximos años.

Como concluye un académico en economía minera, “la estabilidad y la competencia no son objetivos antagónicos, pero requieren un diseño institucional cuidadoso y una supervisión constante para que ambos puedan coexistir”.

En definitiva, el pacto entre Codelco y SQM es una apuesta audaz que ha sido autorizada bajo la lupa de la regulación, dejando en claro que la estabilidad de la industria del litio en Chile dependerá tanto de las decisiones corporativas como de la capacidad del Estado para garantizar un mercado justo y competitivo.