Un error con consecuencias trágicas. El 23 de marzo de 2025, en Tel al-Sultan, al sur de Gaza, 15 trabajadores humanitarios palestinos —miembros de la Media Luna Roja, Defensa Civil y ONU— murieron tras un ataque israelí contra ambulancias que acudían a rescatar a víctimas de un ataque previo. Este episodio, que parecía un trágico accidente en el calor del conflicto, ha dejado tras de sí una serie de debates que aún resuenan más de siete meses después.
El ejército israelí, tras una investigación interna, concluyó que hubo “fallas profesionales” y que el oficial responsable confundió las ambulancias con vehículos de combatientes de Hamas debido a la escasa visibilidad nocturna. Como resultado, un subcomandante fue destituido, pero no se han presentado cargos judiciales ni se ha abierto una investigación independiente.
Desde la perspectiva israelí, la confusión se explica por la complejidad del terreno y la táctica de Hamas, que según sus autoridades, frecuentemente oculta combatientes en ambulancias y hospitales. “Es una guerra en la que el enemigo se camufla entre civiles y servicios humanitarios,” señalaron fuentes militares.
Por otro lado, organizaciones palestinas y grupos internacionales han denunciado que las ambulancias estaban claramente marcadas y que el ataque fue injustificable. Videos recuperados muestran luces encendidas y logos visibles, y la ONU ha condenado el episodio como una violación grave del derecho internacional humanitario.
Además, las víctimas fueron enterradas en una fosa común junto a los vehículos destruidos, y el acceso a la zona estuvo bloqueado por una semana, retrasando las labores de rescate y la recuperación de cuerpos.
Este episodio no es aislado. Según la ONU, más de 150 rescatistas han muerto durante esta guerra y más de 1.000 trabajadores de salud han perdido la vida. La población civil de Gaza sufre un desplazamiento masivo y la destrucción de la infraestructura básica es casi total.
Desde el estallido del conflicto en octubre de 2023, con el ataque inicial de Hamas que dejó 1.200 muertos en Israel, la ofensiva israelí ha causado más de 51.000 muertes en Gaza, en su mayoría mujeres y niños, según el Ministerio de Salud de Gaza.
En Israel, la destitución del subcomandante se presenta como una medida para demostrar responsabilidad, aunque críticos internos y externos cuestionan la transparencia y la ausencia de investigaciones independientes.
En tanto, voces palestinas y de organismos internacionales insisten en que estos hechos evidencian un patrón de impunidad y violaciones sistemáticas, mientras que las autoridades israelíes aseguran que cada incidente es revisado y que se busca minimizar daños colaterales.
Este episodio pone en evidencia la complejidad y brutalidad de un conflicto donde la línea entre combatientes y civiles se difumina, y donde errores fatales tienen costos humanos irreparables. La falta de investigaciones externas y la persistencia de narrativas contrapuestas mantienen abierta la herida.
Como concluye un informe de la ONU, “la protección de los trabajadores humanitarios debe ser una prioridad absoluta, y la impunidad solo perpetúa el ciclo de violencia.”
En definitiva, la tragedia de Tel al-Sultan no es solo un error militar, sino un reflejo de un conflicto que sigue cobrando vidas inocentes y dejando en evidencia la fragilidad del respeto a los derechos humanos en medio de la guerra.
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Fuentes: La Tercera (20-04-2025), informes militares israelíes, Naciones Unidas, testimonios de la Media Luna Roja y Defensa Civil de Gaza.