El alza del dólar en Chile: un desafío que trasciende la cifra
En los últimos meses, el dólar en Chile ha experimentado un aumento sostenido que ha generado un escenario de incertidumbre y debate entre distintos actores del país. Desde abril de 2025, la moneda estadounidense superó la barrera de los $1.000 pesos, cerrando en $1.020 a fines de noviembre, un nivel no visto en más de una década.
Este fenómeno, lejos de ser un simple dato económico, ha devenido en un verdadero coliseo donde se enfrentan visiones encontradas sobre las causas, consecuencias y posibles soluciones.
Un choque de perspectivas
Desde el Gobierno, se ha defendido que la alza del dólar responde principalmente a factores externos, como la volatilidad en los mercados internacionales y la guerra comercial entre potencias que afecta los flujos financieros globales. "La fortaleza del dólar es un reflejo de la incertidumbre global, y Chile no está aislado de ello", afirmó el ministro de Hacienda en una reciente declaración.
En contraste, sectores de oposición y expertos económicos critican la falta de políticas internas que mitiguen esta presión cambiaria. Señalan que la incertidumbre política local, sumada a una inflación persistente y una política monetaria que no ha logrado estabilizar el peso, han agravado la situación. Una economista de la Universidad de Chile comentó: "No basta con culpar al escenario externo; hay decisiones internas que han debilitado la confianza en nuestra moneda".
Los empresarios, por su parte, muestran preocupación por el impacto directo en los costos de importación y en la planificación de inversiones. Mientras algunos sectores exportadores se benefician de un dólar alto, otros, especialmente los que dependen de insumos importados, enfrentan mayores dificultades.
El efecto en la vida cotidiana
Para la ciudadanía, el alza del dólar se traduce en un aumento en los precios de productos importados, presión sobre la inflación y una erosión del poder adquisitivo. El Índice de Precios al Consumidor (IPC) acumuló un alza del 7,2% en los últimos 12 meses, con un impacto directo en alimentos, combustibles y tecnología.
Esto ha generado un clima de preocupación y debate en redes sociales y espacios públicos, donde se mezclan demandas por mayor transparencia y políticas públicas más efectivas.
Conclusiones y desafíos
Tras meses de análisis y confrontación de datos, se concluye que la alza del dólar en Chile es un fenómeno multifactorial que no puede ser atribuido a una sola causa. La combinación de factores externos —guerra comercial, volatilidad de mercados— y desafíos internos —incertidumbre política, inflación estructural— conforman un escenario complejo.
El desafío para Chile radica en diseñar una estrategia integral que combine estabilidad macroeconómica, confianza política y medidas concretas para proteger a los sectores más vulnerables de la población.
Mientras tanto, el alza del dólar seguirá siendo un espejo donde se reflejan las tensiones y contradicciones de la economía nacional, y un recordatorio de que las decisiones tomadas hoy tendrán consecuencias visibles en el futuro cercano.