La apuesta estratégica de Jaime Quintana: ¿Una coalición con Franco Parisi para frenar a Kast?

La apuesta estratégica de Jaime Quintana: ¿Una coalición con Franco Parisi para frenar a Kast?
Actualidad
Política
2025-12-02
Fuentes
www.latercera.com www.ciperchile.cl www.latercera.com www.latercera.com www.latercera.com www.df.cl www.latercera.com ellibero.cl www.bbc.com

- Coalición inédita entre PPD y Partido de la Gente para evitar la ultraderecha.

- Tensión interna en la centroizquierda tras resultados electorales inesperados.

- Desafío a la institucionalidad: cómo atraer a un electorado desencantado y fragmentado.

Un escenario político en ebullición se ha desplegado tras la primera vuelta presidencial que dejó a José Antonio Kast y Jeannette Jara en el balotaje del próximo 14 de diciembre. En medio de esta agitación, el senador Jaime Quintana (PPD) ha lanzado una propuesta que sacude las estructuras tradicionales: la posibilidad de una coalición con Franco Parisi y el Partido de la Gente (PDG) para frenar el avance de Kast.El 21 de noviembre, Quintana planteó esta alternativa en el pódcast “Cómo te lo explico” de La Tercera, señalando que “yo no descartaría nada” si el objetivo es evitar que la ultraderecha llegue a La Moneda.

Un análisis desde la derrota y la oportunidad

El resultado de Jeannette Jara, con un 26,85 %, por debajo de las expectativas oficiales, activó una reflexión crítica en el oficialismo. Quintana atribuye esta caída a dos factores clave: el peso de Franco Parisi, que capturó un 19,71 % de los votos, y la gestión del gobierno de Gabriel Boric, que no logró cerrar con fuerza en esta etapa final. En sus palabras, el gobierno “no está cerrando como hubiéramos esperado” y el Presidente Boric aparece como un actor que, en su intento por disputar protagonismo, terminó afectando la campaña de Jara.

“Se observa a un Boric que le está disputando protagonismo a Jara y que está haciendo todo para posicionar como su antagonista natural a Kast”, afirmó Quintana, apuntando a una estrategia que, aunque no planificada desde La Moneda, tuvo consecuencias palpables en las urnas.

La tentación pragmática: un puente hacia el PDG

La propuesta de Quintana no es menor: abrir un diálogo con Parisi y su electorado, un sector marcado por la desafección con la clase política tradicional y una crítica profunda a la institucionalidad.Con 14 diputados electos, el PDG representa una fuerza parlamentaria relevante que no puede ser ignorada.

Quintana distingue entre la figura de Parisi y el grupo parlamentario, pero insiste en la necesidad de comprender y dialogar con ese electorado. “Por un deber político, casi moral, alguien que pretende gobernar debe saber qué está pensando ese sector”, dijo, subrayando que la política no es para los pesimistas y que el escenario aún está abierto.

Esta apertura incluye la valoración de gestos como la participación de Jara en espacios cercanos al PDG, como el programa “Bad Boys”, que podrían facilitar un acercamiento más efectivo con ese electorado.

Voces en tensión y perspectivas encontradas

Desde la centroizquierda, la idea genera tanto expectativa como escepticismo. Algunos sectores ven en esta coalición una oportunidad para ampliar la base progresista y evitar la ultraderecha, mientras que otros alertan sobre los riesgos de diluir principios y legitimidad al aliarse con fuerzas que han cuestionado la institucionalidad democrática.

En la derecha, la estrategia de Quintana es interpretada como un signo de debilidad y fragmentación del oficialismo, que podría terminar beneficiando a Kast si no logra cohesionar su base.

Constataciones y consecuencias

El escenario político chileno se encuentra en un punto de inflexión donde las alianzas tradicionales se ponen a prueba frente a la emergencia de fuerzas antisistema y la polarización creciente. La propuesta de Jaime Quintana refleja una lectura pragmática y urgente: para frenar a la ultraderecha, la centroizquierda podría tener que abrirse a coaliciones impensadas hace solo meses.

Sin embargo, esta estrategia también implica riesgos significativos. La incorporación del electorado del PDG podría tensionar la coherencia ideológica y la legitimidad de un eventual gobierno progresista, además de enfrentar resistencias internas y sociales.

En definitiva, la política chilena se presenta como un coliseo donde se enfrentan no solo candidatos, sino narrativas, esperanzas y decepciones. La decisión que tome la centroizquierda en estas semanas definirá no solo quién gobernará, sino qué tipo de país será el que se construya tras la elección.

Fuentes consultadas: La Tercera, declaraciones de Jaime Quintana, análisis electoral 2025.